En el porno, las mujeres se comportan de manera más femenina que la mayoría de las chicas modernas. Las mujeres del sexo tampoco se contentan con nada peor, lo que les da una ventaja inestimable entre los amantes del culo. Los tiernos cuerpos de los chicos jóvenes ceden a la presión sexual y durante la follada más intensa con ellos, todo hombre, ya sea un motociclista brutal o un amante modesto para ponerse medias, tendrá un placer comparable a cientos de orgasmos simultáneos. Y si el femboy también ama el esperma, y él lo ama, entonces el amante no podrá contenerse para no rematar cada centímetro del cuerpo.